miércoles, 8 de enero de 2014

La curiosa historia de la ubicación del Palacio de Liria

Seguramente cuando se pasea por la calle Princesa, apenas nos percatamos de que está situada el Palacio de Liria, correspondiente a la Casa de Alba. Esta construcción del siglo XVIII, fue obra de Guilbert y Ventura Rodriguez por encargo del duque de Berwick y Liria, Jacobo Fitz-James Stuart. Pero lo más interesante y curioso de este palacio es la forma en que fue elegido el lugar dónde se alzó este edificio. El promotor de esta obra indicó al arquitecto Guilbert, de que debía construirse su morada en el lugar más sano y puro de toda la ciudad. Por lo que para ello, se dedicó a colocar una serie de tiras de carnes en diferentes sitios de la ciudad. Tras varias semanas, el arquitecto vio el estado en que se encontraba esa carne. casi todas estaban en estado de putrefacción, excepto una, que se encontraba en perfecto estado de conservación. Esta tira se encontraba en la calle de los Afligidos (dónde hoy en día se encuentra la actual calle de la Princesa). De esta forma, se decidió la ubicación dónde albergaría el palacio.

martes, 7 de enero de 2014

Historia de la Calle Abada

Hoy he leído una historia muy interesante sobre una calle y lo mejor que he pensado es poder compartirla por aquí. Espero que os guste.
Me imagino que muchas veces al pasar por las calles de Madrid, no os habéis fijado que en algunas calles están señalizadas con una placa de cerámica, dónde viene reflejado el nombre de la calle y una imagen. Pues una de las imágenes más curiosas que podemos ver, es la de la Calle de la Abada, muy cerca de la famosa Gran Vía.
Está representado un rinoceronte. Nos preguntaremos, qué tiene que ver un rinoceronte con esta calle.
Para conocer la historia, tenemos que remontándonos a muchos siglos atrás. dónde en dicho lugar se instalaron un grupo de portugueses, quiénes formaron un espectáculo con una abada, es decir, un rinoceronte hembra. Era un animal  poco común verlo en Madrid, por lo que la gente pagaba por verlo.
según la leyenda, un jovenzuelo iba por las mañanas a darle un bollo al animal. poco a poco, se fue ganando la confianza del animal y tuvo la seguridad de poder darle dentro de la jaula un bollo recién hecho. Estaba tan caliente, que el rinoceronte se abrasó con él, llegando a tal furia que atacó al joven llevándole por delante.
Tras lo ocurrido, el prior del monasterio de San Martín, fray Pedro de Guevara se hizo cargo de los hechos y decidió mandar a los portugueses, dueños del animal, fuera de esos terrenos, y los cuales, en vengaza de ese suceso, decidieron dejarle suelto al rinoceronte, ocasionando el caos por las calles de Madrid, provocando al menos 20 víctimas.
Por esto mismo, hoy en día podemos ver en esta placa un rinoceronte o una abada.